El martes por la tarde Mariano Martínez fue víctima de un hecho de inseguridad, que por suerte sólo terminó como un acto de vandalismo. El protagonista de Esperanza mía sufrió la rotura de cristales de su camioneta en un intento de robo, y por la noche manifestó toda su bronca por el episodio.
El rostro de Mariano reflejó con fidelidad todo el malestar y cansancio que tenía al presentarse en la Comisaría 29 de la Ciudad de Buenos Aires. "Fue un día complicado, me levanté muy temprano para trabajar, terminé tipo 6 de la tarde. Cuando estaba volviendo a Pol-ka, porque había estado haciendo exteriores, me avisaron que me habían robado", contó a Desayuno americano.
Luego de revisar el vehículo, Martínez explicó: "La verdad es que creo que no me faltó nada de adentro porque creo que agarraron al ladrón, y ahora me quiero llevar mi camioneta, porque hicieron las pericias y todo, pero no me atienden. No sé si es el juzgado, la señorita Soledad Nieto no me atiende, quizá estará muy ocupada. Estoy hace dos horas esperando, pero no me la dan, así que me voy a tener que ir hasta el Tigre en remise. Mañana me levanto a las 5 de la mañana, estoy bastante fastidioso, enojado. Pero es así la cosa".
Al final, Mariano Martínez justificó: "No hice la denuncia porque vi que no me faltó nada y lamentablemente, para mí no vale la pena. Es peor. Desde afuera dicen que si no se hace la denuncia esto no se termina, pero primero habría que arreglar otras cosas para que uno se arriesgue a hacer una denuncia. Ya hicieron las pericias, pero no me dan la camioneta encima de que me robaron, me como el garrón de tener que irme a pie. Tengo a mis hijos y ahora no los puedo pasar a buscar. Soy el damnificado, me rompieron el auto y lo tengo que arreglar… Pero bueno, hay cosas peores. No me pasó nada, estoy bien de salud, que es lo que hay que agradecer. Hay miles de cosas peores. A mí esto en este momento me trastorna, me fastidia, perdí tiempo, y el tiempo no vuelve".