De extremado bajo perfil, la madre de Benjamín Vicuña (39), Isabel Luco Morandé, brindó una entrevista en la que habló de la relación con su hijo, de las separaciones y hasta del dolor por la muerte de Blanquita, la hija mayor del actor chileno con Pampita. En 1986, tras 16 años de matrimonio, la matriarca y Juan Pablo Vicuña Parot decidieron terminar su matrimonio, cuando el pequeño Benjamín tenía 7 años.
“Para mis hijos la separación significó un quiebre doloroso, pero con amor, cariño y cuidado fueron madurando y entendiendo que a veces las relaciones se rompen por el bienestar de la pareja y de los hijos”, contó Isabel, a favor de las familias ensambladas tal como la que supo armar el actor chileno -padre de Bautista, Beltrán y Benicio, de su relación con Pampita- con China Suárez, madre de su hija, Magnolia, y de Rufina, de su romance pasado con Nicolás Cabré.
"Ensamblar familias es un tremendo trabajo. Cuando te separas, que siempre es doloroso y complicado, porque no conozco la separación de otra manera, tienes que tener claro que tu prioridad son tus hijos".
“Cuando te separas, que siempre es doloroso y complicado, porque no conozco la separación de otra manera, tienes que tener claro que tu prioridad son tus hijos. Yo admiro a las mujeres que quieren a los hijos de sus parejas como si fueran propios. Eso lo encuentro maravilloso. Ensamblar familias es un tremendo trabajo y si uno puede aportar porque ha vivido más y ha pasado por la experiencia, entonces te quedas con eso”, explicó a la revista ¡Hola!.
Además, Luco Morandé habló también de su relación con Vicuña. “Yo soy su mamá y lo amo incondicionalmente. Si Benjamín está feliz, yo estoy feliz. Soy muy compinche y amiga con él. Compañeros de alma, sufrimos y nos reímos casi de las mismas situaciones”, completó.