La vida del galán de telenovelas también tiene sus sacrificios, más allá de los beneficios de la fama. Luciano Castro (44) dio testimonio de ello en una entrevista íntima en Cortá por Lozano, donde confesó sus peculiares hábitos de sueño y su necesidad de tomar pastillas para dormir.
"Me levanto todos los días a las 5.30, trabaje o no trabaje", afirmó el protagonista de 100 días para enamorarse. Intrigada por el espíritu madrugador de Luciano, Verónica Lozano le pidió que detallara qué hacía mientras el resto de su familia seguía rendida a los brazos de Morfeo: "Desayuno, voy al gimnasio, hago mis cosas, porque a las 8 tengo que estar en la Panamericana para poder estar a las 9 o 9.30 para grabar la tira".
Más tarde, el esposo de Sabrina Rojas admitió entre risas de pudor: "Soy bastante aburrido. Me duermo a las 21, pero me acuesto a dormir, no a ver televisión u otra cosa".
Sin embargo, esa rutina diaria tiene un trasfondo que Luciano Castro se animó a contar en su divertida sesión de terapia con Lozano: "Hace dos meses que lo dejé, pero iba al psiquiatra. Me medicaba, pero para dormir, no para vivir. Me medicaba porque me cuesta conciliar el sueño, me tengo que dormir temprano y me duermo a la 1 de la mañana. Es que tengo esta costumbre de pensar en lo que hice en el día, en dónde erré, dónde no, en dónde puedo mejorar. Y eso hace que me disperse, hasta que pongo la tele… ¡y me quiero pegar un corchazo!".