Hoy, Ernesto Larrese vive un presente pleno: es parte del fenómeno de ATAV, donde interpreta al juez Iturbide, un polémico personaje que es seducido por interés por Torcuato Ferreyra (Benjamín Vicuña), con quien protagonizaron un fogoso beso que en su momento dio que hablar.
Y cuando se apagan las cámaras, el actor comparte su vida con su marido, el representante Alejandro Vanelli, con quien fueron noticia allá por 2010 al celebrar el primer matrimonio igualitario de la Ciudad de Buenos Aires, sentando un precedente histórico.
A nueve años de su casamiento, la pareja marcha viento en popa y pudo superar las varias crisis en el medio, tal como le admitió Larrese a la revista Pronto en una entrevista en la que dio cuenta del nivel de intensidad de ambos. Sus personalidades explosivas se fusionaron y, alguna vez, vivieron "hasta escenas de pugilato", segun él mismo describió.
"Los dos somos pasionales y en una discusión fuerte terminamos yéndonos a las manos. No nos lastimamos, pero sí nos dimos fuerte", contó el actor y explicó que volvieron de esa situación "pidiendo disculpas y teniendo paciencia".
"Los dos somos pasionales y en una discusión fuerte terminamos yéndonos a las manos. No nos lastimamos, pero sí nos dimos fuerte".
Afortunadamente, supieron rescatar lo bueno hasta de los peores momentos para poder reinventarse como pareja a lo largo de su relación.
"Tuvimos la inteligencia emocional de aprovechar cada crisis para potenciarnos", aseguró el artista y contó que junto a su marido construyeron una posada en Villa Giardino, Córdoba, como uno de los tantos proyectos que los permitió reencontrarse "desde otro lugar".