Lo esperó toda su vida, pero no se animaba a luchar por hacer lo que realmente la hacía feliz, hasta que a los 63 años Clotilde Baudonnet aprovechó la oportunidad que se le presentó en Soñando por cantar 2012. Y no la desaprovechó, con la cálida mirada y su tierna voz, brilló como una eximia profesional en la noche de San Juan.
“Esta es una oportunidad que la he esperado toda mi vida. Porque tengo seis hijos, tengo 15 nietos y la he esperado toda mi vida. Y ahora se dio, a esta edad. Por algo pasó, yo creo que fue obra de Dios”, confesó Clotilde.
Con una excelsa entonación lírica, la alegría invadió el espíritu de la abuela que rejuveneció y conmovió con su ejemplo de vida tanto al público como al jurado interpretando magníficamente O mio babbino caro.
Deslumbrada, Patricia Sosa preguntó perpleja por qué no se dedicó a la música: “Yo me casé muy joven. Un día nos juntamos a cantar con un primo que es tenor, cuando se arrimó un muchacho y me dice ´¿no querés hacer una prueba para el Colón?´ Pero yo desgraciadamente tenía un esposo que no le gustaba la música. No la pude hacer. Yo estudié de grande, cuando me divorcié”.
“No dejes de hacer esto, sos maravillosa. Uno tiene que ser responsable del don que le regalaron y no puede ser tan egoísta de guardárselo. O porque mi marido no quiere, o porque no me dio el tiempo”, enfatizó la jurado. Para ponerle la frutilla al postre, Clotilde emocionó cantando el Ave María como si fuera un ángel, quien clasificó para la próxima instancia del certamen.