El reemplazo que Nancy Duré (52) hizo de Pochi en Puro Show (lunes a viernes a las 10.30 por eltrece) por dos semanas fue, sin que nadie lo anticipara, el casting en vivo para que la periodista se conviertiera finalmente en nueva panelista fija del ciclo de espectáculos.
“Estoy con muchas ganas de arrancar y siento felicidad. Me da mucha alegría volver a eltrece, donde trabajé mis mejores años en televisión, en Socios del Espectáculo. Todos me dieron una gran bienvenida y es un placer, pero admito que me sorprendió la propuesta”, asegura Nancy a Ciudad.
Egresada de la Facultad de Periodismo de La Plata, Nancy admite que desde niña “jugaba que hacía un programa de chimentos contando chismes de los vecinos".
La pegó en 1997 gracias a una entrevista a Guillermo Barros Schelotto que consiguió tras conmover al papá del mellizo, justo cuando estaba por pasar de Gimnasia a Boca. “El fútbol me sirve para ganar las minas”, fue el título de aquella nota. Pero antes de arrancar en el diario Crónica trabajó, según cuenta, “con una cuadrilla de obreros”.
Con el tiempo participó con Marcelo Polino en Ponele la firma, en Intrusos con Flor de la Ve, con Susana Roccasalvo en Implacables, con Ángel de Brito en LAM.... “Marcela Tauro fue la mina más generosa del mundo conmigo”, recuerda.
-¿Es verdad que trabajaste con una cuadrilla de operarios?
-Apenas terminé el secundario, vi un aviso en el diario en el que buscaban estudiantes. Como estaban poniendo el cable para la televisión paga en La Plata, necesitaban que pidiéramos permisos en las casas para poner una grampa en el techo a cambio de nada. Esto a la empresa le ahorraba tener que poner un poste en la calle. Por cada permiso que conseguías, pagaban un peso, que era un dólar.
-¿Cómo te fue?
-El primer mes cobré 1300 pesos/dólares. El segundo y tercer mes más o menos lo mismo. Al cuarto el gerente dijo que era imbatible. Por eso me propuso que vaya con la cuadrilla de obreros que iban haciendo el cableado para pedir las autorizaciones donde no las habían conseguido. Ahí me lo pagaban tres pesos.
-¿Cómo era el trato con tus compañeros de trabajo?
-Subíamos a la camioneta, yo en la cabina. Al mediodía comíamos todos en la esquina. Fue una experiencia maravillosa. Estos chicos me cuidaban de una manera increíble. Si alguien me llegaba a tratar mal en la calle, ellos salían a defenderme.
-¿Trabajaste mucho así?
-El cableado duró poco... Después me ofrecieron hacer un relevamiento por los alrededores de La Plata. Iba con un asistente mientras iba haciendo los planos con los que después se planificaba lo que se iba a hacer. Cuando terminé me propusieron hacer lo mismo en Chile y en Brasil.
-¿Y te fuiste?
-Yo era menor de edad y no tenía autorización de viajar. Ahí se enteró el gerente y pasé a trabajar en la recepción de la empresa.
-¿Qué hiciste con el dinero que ganaste?
-Lo primero que hice fue alquilar un departamento y comprarme los muebles, que hasta hace poco estuve usando. Hasta que saqué un crédito para comprarme mi departamento en cuotas en Berisso. Para hacerme unos mangos extras mientras estudiaba, salía a repartir las facturas por toda la ciudad.
La vida privada de Nancy Duré
-Te gusta lucir tu cuerpo. ¿Cómo hacés para mantenerte?
-Tengo una muy buena genética y soy vegana. Pero sí me gusta la actividad física. Si el tiempo me lo permite, todos los días hago algo de ejercicio, porque, cuando no hago algo me siento mal. Además, soy vegana. Tengo 52 años bien llevados y con todo en funcionamiento.
-¿Cuál es el secreto de tu piel?
-Siempre me bardean con que me pasé de autobronceante o cama solar, pero mi color es natural. Tengo una colración que con segundos al sol quedo renegrida, como decía mi abuela. Lo mismo que los dientes, no uso carillas, son naturales.
-¿Cómo te cuidás?
-Soy fanática de las cremas. Un amigo que tiene un laboratorio me prepara cremas especiales para tener la piel siempre hidratada, firme y brillosa.
-¿Estás en pareja?
-Estoy solterísima. Nada de lo que se estuvo diciendo estos días es cierto. No estoy con Carlos Monti ni con Baby Etchecopar. Estoy sola hace bastante ya.
-¿Por qué?
-Pasa es que también estoy en una muy linda etapa, porque mi hijo (N del R: Manuel, fruto de su relación con el periodista Fernando Cerolini) ya tiene 23 años y se independizó. Estoy viviendo sola de nuevo como a los 20 años.
-¿Te sentís libre?
-Es un placer comer a la hora que quiero, y si no quiero, no como. Tengo todo impecable. Nadie me deja ninguna toalla tirada por ningún lado. Salgo cuando quiero sin dar explicaciones. Cuando uno pasa los 50 tiene mucha seguridad que a los 20 no tiene. Me siento bien físicamente. Puedo decir que estoy en un gran momento, estoy plena.
-¿Estás en Apps de citas?
-Estuve en Inner Circle y no me fue bien. Lo que conocí ahí no me sirvió. Me pasó muchas veces que me escriben en Instagram diciéndome: “Te vi en tal lugar”. Entonces respondo: “¿Por qué no te acercaste? Si te acercás, por ahí el teléfono te lo doy yo porque me generaste algo". Y no tiene que ver con lo físico.
-¿Será que asustás a los hombres con tu personalidad?
-Sí, asusto. Está el que te das cuenta que te contacta porque quiere que sea pública la relación, como los Políticos. Como también existe el tipo común que se asusta mucho de ir a un estreno de teatro y le hagan una foto.
-¿Encarás si te gusta alguien?
-No me gustan los princesos. Quiero que me seduzcan. Tampoco tengo problemas con la edad, con un límite de 16 años más o menos que yo. Igual, prefiero que sean mayores o de mi edad. Me gustan mucho los músicos, pero los comprometidos que se abstengan. El hombre más importante es el que está por venir, y lo estoy esperando.
-¿Tuviste relaciones con famosos?
-Sí, pero ninguno ha sido un noviazgo. Cosas que por algo no han trascendido. De joven solía suceder que cuando una iba a hacer alguna entrevista, después había algún mensaje. Y sí, he concretado de encuentros fuera del ámbito laboral. Eso sí, jamás los contaría, porque me daría mucha vergüenza que después me ninguneen.