En la tierra del realismo mágico que popularizó Gabriel García Márquez, al punto de la consagración mundial con el premio Nobel de literatura, había originado la milagrosa historia de un presunto "niño ángel" que guió a los rescatistas que trabajaron en la tragedia del avión de Chapecoense. Al final, el chico cuya ayuda fue fundamental para encontrar con vida a Alan Ruschel, era un simple mortal llamado Johan Alexis Ramírez.
"Comenzaron a sacar a los heridos pero estaban abriendo trocha hacia el morro y así era muy demorado, así que les dijimos que había un camino más fácil".
El joven de 15 años vive con su familia en un rancho a cinco minutos del sitio del accidente aereo con su papá, Miguel, su mamá, Miriam, y su hermana Jessica, de cinco años. Según relató el propio Johan al diario El Colombiano, él y su papá (Miguel) estaban acostados en su hogar de La Unión instantes antes de arribar al lugar de los hechos: “Ya había algunos bomberos y policías cuando llegamos. Comenzaron a sacar a los heridos pero estaban abriendo trocha hacia el morro y así era muy demorado, así que les dijimos que había un camino más fácil y más rápido”.
"Ya estaban saliendo con Alan Ruschel, y le dije a un bombero que conocía el camino. Los acompañé y volví corriendo donde estaban los policías para decirles que teníamos uno de los heridos. (...) Hubo uno al que cargamos unos diez o quince metros pero murió, no alcanzó a llegar a la ruta".
"Subíamos por más heridos cuando cerca de las 2AM un policía nos sacó de mala manera. Nos dijo que nos fuéramos, que quién sabe con qué intenciones fuimos".
Respecto a su súbita y enigmática desaparición, Johan Alexis Ramírez explicó: “Subíamos por más heridos cuando cerca de las 2 de la mañana un policía nos sacó de mala manera. Nos dijo que nos fuéramos, que quién sabe con qué intenciones habíamos ido. Un bombero discutió con él y le dijo que estábamos colaborando. Para evitar problemas, nos fuimos”.
Al final, el niño ángel se sinceró: “Estaba muy cansado pero no pude dormir. Me dio mucha satisfacción ayudar a salvar vidas y nunca lo hice para ir a buscar objetos materiales”.