A veces la televisión puede hacer mucho más que sólo entretener. Por ejemplo, en el show Sense8 de Netflix se manejó una premisa simple: ocho personas de orígenes y países distintos, conectados de alguna manera.
Los personajes tenían la habilidad de quebrantar las reglas del tiempo, y estar allí cuando se necesitaran. Era como si podían convocarse a través de sus sentimientos y no por una especie de vínculo mental.
Entonces, ¿qué pudieron ellos enseñar a la audiencia sobre la empatía? Bueno, quizás mucho. Acá hay varias lecciones interesantes para recapitular.
Sentir antes de pensar
Los miembros del equipo no podían controlar cuándo o por qué aparecían repentinamente en la vida de los demás. Sólo estaban allí si los necesitaban.
Sus acciones se mantenían ligadas ciento por ciento a sus sentimientos. En ocasiones estaban al lado de su compañero o hasta podían convertirse en la otra persona… cual si se tratara de un espejo.
Los sentimientos son un puente a la empatía, y al momento en que una persona los expresa, no queda sino aceptarlos.
Sin juzgar
Nunca los miembros de Sense8 se detenían a pensar “¿por qué estoy ayudando a esa persona?”, simplemente pasaba. Los personajes demostraron lo importante de ayudarse mutuamente, para que cada quien cumpliera su viaje individual.
Existía el respeto entre estas ocho personas, sobre las decisiones que tomaban en su vida y la manera en que se responsabilizaban de su destino.
Sabían qué hacer
Cada cual parecía saber qué hacer y cuándo usar cierta técnica para lograrlo. Pero ¿dé que forma? Leyendo el lenguaje corporal de la otra persona y entendiendo sus palabras sin filtros.
Eran como el resto
Se trataba de un grupo de individuos con serios problemas: sobrevivir en un barrio pobre africano; hacer frente a una relación familiar abusiva; lidiar con la pérdida de un bebé; reconciliar una imagen pública con la realidad; escapar de una vida con muchos errores del pasado; entre otros.
Ellos no trataban de salvar el mundo; sino de encontrar un camino a través de él.
Sin respuestas
No siempre se les veía enfrentando poderosas batallas físicas, sino consolando a su amigo o amiga por un evento del que no tenían idea. Esto pasa casi siempre en la vida real. Es decir, ¿Cuántas veces se dan consejos sobre un tema del que no se tiene conocimiento? La empatía permite aprender a escuchar al otro con sinceridad y ponerse en sus zapatos.
La empatía es contagiosa
En la serie, los actos de empatía de los personajes aumentaban, al igual que el placer que obtenían de ellos. Al plantar la semilla de la empatía, esta crece y se transforma en un refugio beneficioso.
Interconexión
En la primera temporada, los personajes estuvieron asociados por temas únicos. A medida que avanzaron los episodios se volvió más complejo, con más de un personaje en una escena, ayudándose mutuamente.
Tal vez la fórmula ganadora de Sense8 fue su optimismo acerca de la humanidad. Apartando los temas sobrenaturales, su trama dejó ver que no era necesario tener súper poderes para practicar la empatía por el bien común.
Los creadores recordaron que como humanos estamos interconectados o vinculados, y eso basta para trabajar por un mundo diferente, más real y acogedor.