Ubicado en el Parque de Arte Nikola-Lenívet, en la región rusa de Kaluga, un “castillo del coronavirus caníbal” fue prendido fuego como parte de las celebraciones de la Máslenitsa. La quema de la instalación artística buscó simbolizar la esperanza en poder superar la pandemia de covid-19.
Bajo esa premisa fue como los espectadores que asistieron a la ceremonia vieron arder al castillo de 24 metros de alto, que fue fabricado con materiales naturales como enredaderas y heno. Las imágenes del singular hecho, en las que se descubre a la gente sobre la nieve y rodeando al castillo, rápidamente coparon las redes sociales.
La celebración de las festividades de la Máslenitsa, que dura una semana, precede al ayuno más significativo del año ortodoxo, la Cuaresma, que también conmemora la llegada de la primavera. Así es como, también durante la semana de Máslenitsa, la gente come 'bliný', tortitas de harina y huevo, uno de los elementos más característicos y populares de esta tradición.
Fuente: RT.