A siete meses de transitar una fuerte crisis que los separó, Luciano Castro (44) y Sabrina Rojas (39) disfrutan de un presente amoroso estable junto a la bella familia que formaron: el matrimonio tiene dos hijos, Esperanza (6) y Fausto (4). Por su parte, Castro ya era papá de Mateo (17), fruto de una relación pasada.
"Las tormentas siempre ayudan a cambiar y a estar mejor. Después de la reconciliación es cuando mejor sexo tenés".
Esquivo a dar detalles de su intimidad, Luciano asistió al evento promocional de Pequeña Victoria, novela con la que vuelve a la pantalla de Telefe el 16 de septiembre, y reflexionó sobre la gran repercusión mediática que tuvo la breve ruptura. "Se hizo todo muy público y me sentí expuesto de una forma que no estuvo buena. Me dio vergüenza todo lo que se generó y me sentía mal. Pero ya pasó, ya está. Nos sucedió lo que le pasa a cualquier pareja, con la diferencia de que somos conocidos y todo el mundo se enteró. De repente iba al supermercado a comprar un pionono y el cajero me preguntaba: 'Che, ¿es cierto que...?'. ¡Uy, Dios, acá no! ¡Me agarraba pudor!", dijo Castro en la revista Pronto, asumiendo la incomodidad que vivió el verano pasado.
"¿La tormenta los estabilizó?", repreguntó el periodista. Y el actor respondió con un sincericidio hot: "Sí, sí. Las tormentas siempre ayudan a cambiar y a estar mejor. Después de la reconciliación es cuando mejor sexo tenés".