La lluviosa mañana del jueves, Rocío Oliva (28) fue al encuentro de Diego Maradona (58), en el marco de una mediación previa a elevar a juicio su reclamo de 6 millones de dólares como compensación por los 6 años que fueron pareja. Acompañada por sus abogados, Ana Rosenfeld y Fernando Burlando, la joven no solo no se reunió con el Diez, sino que tampoco se presentó Matías Morla en representación de su expareja.
Agotada la espera prudencial, Rocío se retiró de las oficinas en su camioneta y paró para hablar con Involucrados, sin entrar en detalles sobre lo que sucedió en la sala: “De eso hablará la abogada, yo no sé”. En cuanto a los faltazos de Morla y Maradona, Oliva expresó: “Yo tenía entendido que Diego le había pedido a Matías que venga, pero no sé. Habrá que preguntarle a Matías o a Diego. No puedo hablar por ellos”.
En cuanto a la relación con Diego, Rocío aclaró: “Tenemos buena relación”. Cuando le preguntaron por los rumores de noche de sexo y lujuria, o de su pelea con Lili, la hermana del Diez, la periodista deportiva relativizó entre risas: “Con Diego está todo bien, no hubo violencia ni nada por el estilo. Con Lili, no sé, yo voy a ver a Diego. A mí quién esté, le guste o no le guste, es cartón pintado. Yo voy a ver a Diego, a charlar, tomar unos mates...”.
Ahí, Cora Debarbieri preguntó: “¿Tienen una relación de pareja, se dieron una nueva oportunidad?”. De inmediato, Rocío reaccionó: “No, relación de pareja no”. Implacable, Debarbieri insistió: “¿Vas todos los días, te quedás a dormir?”. Con un rostro ruborizado, esforzándose por no reírse, afirmó: “No, no. Nada que ver. Ni voy todos lo días ni me quedo a dormir”.
Más tarde, se explayó sobre el altercado con la hermana de Diego: “Con Lili hubo un intercambio de palabras y nada más. Yo no grito porque me saca mucha energía, no hay cosas que me enojen”.
Antes de levantar el vidrio de su auto y poner primera, Rocío Oliva clausuró la posibilidad de volver a ser pareja de Diego Maradona: “Es imposible tener una nueva relación”.