No fue su típico show pop. De hecho, y para sorpresa de todos, fue algo más new age: Beyonce (35) ofreció este domingo un tributo a la maternidad en los Grammy, en su primera aparición pública desde que anunció su embarazo.
El anuncio, que hizo a través de las redes sociales, causó furor, por lo que esta presentación era de las más esperadas del espectáculo de este domingo en Los Ángeles.
La diva de 35 años hizo una extravagante actuación con toques de espiritualidad india y del Egipto antiguo.
Primero aparecieron imágenes de la orgullosa madre mostrando en una bikini su pancita de embarazada. Y luego entró en escena con una corona y una capa dorada, acompañada de una docena de mujeres que se formaron a su alrededor y convirtieron la tarima en un mar de flores.
Cantó dos piezas de su más reciente álbum, Love Drought y Sandcastles, intervenidas con frases sobre el poder de la mujer.
"Si vamos a sanar, que sea glorioso", dijo. Al terminar la presentación, dirigió la mirada hacia su esposo, el rapero y empresario Jay Z y a su hija Blue Ivy.
Además, no se fue con las manos vacías: Beyonce ganó un Grammy por el videoclip de Formation, que hace tributo al movimiento Black Lives Matter (Las vidas negras importan) con imágenes de policías levantando los brazos, como rindiéndose, frente a un niño negro.
Fuente: AFP.