Hace tres años que está de novia con el empresario inmobiliario yanqui Brent Federighi, y aún cuando conviven en casas separadas, Julieta Díaz sueña con el día en que su novio se decida, tome la iniciativa y la sorprenda con una propuesta de casamiento: "Si de acá a un tiempo no se da, quizá cado uno tenga que tomar su rumbo; espero que no", dice en tono intimidatorio.
Cuenta, además, que entre ellos hablan inglés, y aunque a veces lo intercalan con el castellano, ella intenta que se sea el otro idioma el predominante para hacerlo sentir "como en casa".
Con respecto al anhelo de casarse, cuenta: "La relación es seria, así que fantaseo con que va a venir, se va arrodillar, me va a pedir matrimonio y nos vamos a casar", concluyó.