Es la segunda semana consecutiva que su imagen está en el ojo de la tormenta, pero el motivo de estos días es diferente al de la semana anterior. Días atrás había sido el receptor de la absurda y criticada pregunta de Mirtha Legrand, y hoy su nombre resuena por las durísimas y sorpresivas palabras que le dedicó a . Su discurso anti Tinelli tuvo lugar en un evento con sede en la ciudad de Rosario, donde, con el poder que le otorgó un micrófono, se encargó de atender al conductor de "ShowMatch".
"Tinelli es un hijo de puta, un vivo, un sátrapa que se ríe de todos nosotros y que ya no tiene retorno. Después de este año, yo creo que tendría que retirarse y ser productor. Por el bien de la mente humana, siempre le aconsejo a la gente que por favor cuando vean a Tinelli, apaguen el televisor. Ese es mi consejo, después que cada uno haga lo que quiera", desarrolló con una templanza no coincidente con el tenor de las palabras que estaba pronunciando.
Hasta aquí este descargo podía entenderse como la prédica de un espectador al que no le gusta el contenido actual del ciclo comandado por Tinelli, pero no; una cuestión más personal motivaba esta opinión.: "Cuando pasó mi problema con Lucho (Avilés) en "Cantando por un sueño", no movió ni un dedo, no hizo nada. Es más, le pedí que sea padrino de mi fundación, ya que dice que ayuda tanto, por favor, si supieran ustedes que ni siquiera levantó el teléfono”.
“Todo lo que ven en TV está armado, con alevosía y malicia. Si vas ahí, te tenés que meter en un diálogo para hablar de este que vende chocolate y a mí no me interesa", confió al canal de la ciudad santafesina.
Terminado el monólogo, quedó la sensación de que al modisto más polémico de la Argentina no le tiembla la lengua, ni siquiera a la hora de enfrentarse con el principal conductor del país.