Dentro de la ventana al mundo que es Internet, las webcams ocupan un lugar muy importante. Es que gracias a estas pequeñas cámaras digitales, es posible ver, entre otras cosas, a las personas con las que se habla a través de un mensajero; capturar imágenes (fijas o móviles) para enviarlas por correo; llevar a cabo una videoconferencia; ver el estado del tránsito de una autopista; vigilar la casa o el colegio de los chicos.
Aunque parecen sencillas por su pequeño tamaño, la gran cantidad de ofertas de cámaras puede marear al futuro comprador. Lo mejor entonces es conocer los atributos más importantes que se deben tener en cuenta, para tener un panorama claro antes de comprar la webcam.
Resolución
Es quizá el punto fundamental que diferencia a las webcams. Los modelos de gama baja llegan a los 320x240 pixeles. Es decir, imágenes que al aumentar de tamaño se van a ver pixeladas. Por supuesto, son las más baratas.
Las cámaras de gama media traen una mayor calidad de imagen, con resoluciones de 640x480 pixeles.
Las de gama alta, por su parte, ofrecen resoluciones iguales o mayores que las de gama media, pero se distinguen por incluir otras prestaciones como conexión inalámbrica, zoom, mando a distancia, salidas para conectores de señal de video, etc.
Cuadros por segundo
Los fps (frames per second) es una medida que simboliza el número de imágenes que la cámara captura por segundo. Cuanto mayor sea esta cantidad, mejor se percibirá el movimiento. Si el número de imágenes por minuto no es suficiente, se notarán cambios bruscos cuando la imagen se esté moviendo.
Sensor
Aunque la mayoría de la cámaras llevan un CCD (Changed Couple Device o dispositivo de transparencia de carga) que vendría a ser el elemento que reemplaza a los rollos tradicionales. Pero existe también el tipo CMOS, que, aunque es más barato, suele presentar algunos problemas en la captación de movimiento, y a veces proporciona imágenes con ruido.
Conexión
La conexión con la computadora suele realizarse mediante USB. Claro que puede ser USB 1.1 o 2.0. Esta última es la más rápida.
Óptica
Queda claro desde el vamos que no se le puede exigir demasiado en cuanto a características técnicas a una webcam. No al menos como si fuera una cámara digital de fotografía. Algunas, sin embargo, traen la opción de ajuste para enfocar la imagen a distintas distancias.
Micrófono
Puede venir incorporado o en forma separada. La elección de uno u otro está muy relacionada con el lugar donde vaya a situarse la cámara. Si se pondrá relativamente lejos del usuario, el micrófono debería estar más cerca. En caso contrario, conviene elegir el otro.
Diseño
Bueno, aquí la cuestión es a gusto de cada uno. En general, las webcams son pequeñas y se pueden acomodar sin problemas en un rincón del escritorio. Pero las hay circulares, más cuadradas, altas, bajas, etc. El lugar ideal para colocar la webcam suele ser arriba del monitor, por lo que una que se pueda colocar sin problemas en ese lugar sería la opción adecuada.
Con o sin cable
También depende del gusto de cada uno, aunque no cabe duda que una webcam inalámbrica permite evitar que se enrede con más cables detrás de la computadora. Estas cámaras suelen ser utilizadas para seguridad.
Software
Los drivers o controladores deberían, como mínimo, permitir la instalación y el funcionamiento sin problemas. Después, lo ideal sería que trajeran un programa de edición de imágenes, grabación de video, detección de movimiento, entre otros.
Funciones adicionales
Además de permitir mostrar lo que uno hace, las webcams pueden tener otras funciones adicionales, como la de cámara de fotos y de video, que funcionan independientemente. Así será posible sacar fotos en cualquier lugar, ya que suelen ser pequeños y muchos de ellos llevan flash. Obviamente, no hay que esperar una gran resolución como las de las cámaras digitales, pero cumplen su rol dignamente. También permiten capturar pequeños videos.
La ventana al mundo
Muchos sitios ofrecen imágenes capturadas por webcams alrededor del mundo. Algunas están situadas en lugares turísticos y otras en sitios muy llamativos.
Por ejemplo:
También se las dedica para algunos usos específicos:
Por Miguel Distéfano.