Son de esos bloopers que nos hacen reír por el sólo hecho de que la persona en cuestión se cae (claro está, sin consecuencias graves). Y aunque es algo casi innato en los seres humanos, cuando el tropezón le pasa a uno la sonrisa desaparece y se nos cuelve el rostro colorado de la vergüenza.
Bueno, justamente, a esta pobre joven le tocó estar del lado de la víctima. La chica estaba realizando una producción en la playa e intentaba posar súper sexy en bikini hasta que llegó una ola y la arrastró. ¡Mal!
¿Qué más se puede agregar? Nada, sólo poné play y reíte un rato.