Un grupo de ingenieros argentinos se encuentra trabajando en el diseño de una especie de manta que sea eficaz y resistente para proteger a los satélites nacionales de las temperaturas extremas del espacio. Los materiales que utilizarán serán el cartón, acrílico y aluminio.
El ingeniero aeronáutico Pablo Ringegni, director del GEMA y su grupo de diseñadores, tienen más de seis años trabajando en el análisis y diseño térmico de la antena del SAOCOM 1A, la cual mide 10 metros de largo por 4 metros de ancho en su modo desplegado.
El Satélite Argentino de Observación con Microondas (SAOCOM) está compuesto por el SAOCOM 1A y el SAOCOM 1B, dos satélites de observación terrestre que pertenecen a la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) y tienen el objetivo de medir la humedad del suelo y la detección de derrames de hidrocarburos en el mar, además del seguimiento de la cobertura de agua durante inundaciones.
Los siete paneles solares que posee la antena radar del SAOCOM 1 fueron cubiertos con mantas diseñadas y confeccionadas por el equipo de la Facultad y por INVAP. Cada satélite llevará unas 500 mantas diseñadas a medida y fabricadas con diferentes materiales aislantes.
El ingeniero aeronáutico Elmar Mikkelson, integrante de los "manteros" como se autodenominan, explicó que "en el espacio un aluminio pulido a la sombra puede alcanzar una temperatura de casi menos 270º C, y en el sol llega a alrededor de los 300º C. Entonces, para proteger a un satélite, que no se enfríe o no se caliente excesivamente, se le pone un elemento aislante. Las mantas térmicas cumplen esa función".
En el año 2012 se dio inicio a la preparación de este diseño en las cámaras de termovacío del Centro Espacial Teófilo Tabanera (CETT) de CONAE en Córdoba. En ese momento se realizó una prueba con medio panel de antena, simulando las condiciones espaciales.
En el año 2014 fueron trasladadas estas pruebas al exterior, específicamente en el laboratorio IABG de Alemania, donde funciona un simulador solar, una de las cámaras de termovacío más grande del mundo. En esa oportunidad, profesionales del GEMA viajaron junto con becarios de Ingeniería Industrial y Aeronáutica para ensayar un panel entero del satélite.
En el 2017 fueron llevadas a cabo las últimas pruebas en la sede de INVAP de Bariloche obteniendo resultados positivos y alentadores, por lo que el director del GEMA actualmente se encuentra terminando de cubrir a la antena del satélite para su lanzamiento que será aproximadamente a mitad de este año.
El GEMA será el encargado de estudiar los datos que se bajen del satélite por telemetría respecto a la temperatura de los distintos sectores de la antena, para luego compararlos con los datos de las simulaciones realizadas.