En este 2018, aunque los dorados y los rubios serán los colores más en tendencia para llevar en el cabello, también se da cabida a otras tonalidades y a las combinaciones de varias de ellas.
Mientras que en 2017 reinaron los castaños más oscuros y las raíces descuidadas, este año será el turno de todas las variaciones de rubio, las tonalidades caramelo y las mezclas más populares como el bronde (rubio + castaño) o el blorange (rubio + pelirrojo).
Desde los tonos más fríos, ideales para las pieles más claras, a los dorados y las tonalidades más cálidas y brillantes que son perfectas para las más oscuras.
El uso del pelo color gris sigue así como tener dos tonos, dejando desde el inicio del cuero cabelludo el color original del cabello y luego haciéndolo más claro. Las mechas y reflejos son igualmente una opción para dar luz y movimiento a la cabellera.
Vuelven las melenas rojas y para las adolescentes se utilizarán los cabellos mixtos con tintes en varias capas, con una mezcla de colores llamativos y brillantes como lilas y rosas en todas sus gamas.
Sea cual sea el color elegido, una de las tendencias más marcadas es la combinación de tonalidades similares o más contrastantes, según sea el gusto de cada persona.
La elección de los tintes
Para teñir el cabello están las opciones de ir a un salón de belleza o hacerlo en casa. En cualquier caso, uno de los aspectos más importantes es elegir un tinte de buena marca y que no produzca ninguna reacción alérgica.
Estos productos traen el gel para preparar el pelo antes de comenzar el trabajo, el tinte como tal y un aceite para aplicar al finalizar que da brillo al cabello. De esta manera, el cabello estará protegido evitando que el químico lo pueda maltratar demasiado.