Una tremenda noticia enluta al fútbol argentino y conmueve a la sociedad. El futbolista Emanuel Ortega, de sólo 21 años, murió el jueves 14 , el 3 de mayo.
"Capaz no llegue a jugar profesionalmente al fútbol o capaz sí. Pero como amateur que soy, cuando voy a cada pelota, voy a morir. Cuando mis piernas dicen 'BASTA', mi corazón dice 'SEGUÍ'. A diferencia de los profesionales, cuando se me rompen los botines no los cambio, paso noches arreglándolos, pegándolos para poder seguir jugando. Porque es lo que amo. El fútbol es MI VIDA, no sólo un pasatiempo, es el que me hace olvidar de todo y por el que daría mi vida. El día que no pueda jugar más, ahí terminará mi vida".
El defensor había chocado contra un rival de Juventud Unida, mientras disputaba la pelota al borde de la línea lateral, y dio de lleno contra el muro de cemento que sostiene el alambrado del estadio.
Rápidamente la ambulancia ubicada al costado de la cancha ingresó al campo de juego y Ortega fue velozmente atendido y trasladado a un hospital cercano. Debido a la gravedad del caso, luego Emanuel fue derivado al Sanatorio Mitre del barrio porteño de Once, y allí empezó a evolucionar favorablemente.
El 5 de mayo, a través del Facebook oficial de San Martín de Burzaco, se informó: "Emanuel Ortega está estable. Se despertó, habló con los médicos, reconoce dónde está, qué le pasó y recuerda todo.
El parte médico es fractura del occipital, tiene pequeños hematomas, y hay que aguardar de 24 a 48 hs para ver su evolución. El lateral fue trasladado al Sanatorio Mitre, de Once".
Sin embargo, su cuadro empeoró en los últimos días y el jueves a las 2.30 de la madrugada falleció. La AFA decidió primero suspender la fecha de la Primera C, en la que jugaba Ortega, y luego extendió la medida a todas las categorías del fútbol argentino, para el próximo fin de semana.
Tras conocerse la noticia, la conmoción fue total y el club San Martín publicó un viejo mensaje de Ortega, de su perfil personal de Facebook, escrito en 2012, y que ahora cobra otra notoriedad: "Capaz no llegue a jugar profesionalmente al fútbol o capaz sí. Pero como amateur que soy, cuando voy a cada pelota, voy a morir. Cuando mis piernas dicen 'BASTA', mi corazón dice 'SEGUÍ'. A diferencia de los profesionales, cuando se me rompen los botines no los cambio, paso noches arreglándolos, pegándolos para poder seguir jugando. Porque es lo que amo. El fútbol es MI VIDA, no sólo un pasatiempo, es el que me hace olvidar de todo y por el que daría mi vida. El día que no pueda jugar más, ahí terminará mi vida".
Rápidamente la carta de Emanuel se viralizó y conmovió a todos. Incluso varios famosos dejaron sus condolencias en Twitter.