El jueves 16 de diciembre, Susana Giménez llegó a Punta del Este en un avión privado junto con su glamoroso equipaje de Louis Vuitton. Se la vio alegre, con una gran muda de vestidos, y con ganas de instalarse en "La Mary", su casa.
El lunes 6 de diciembre, la diva se sometió a un lifting de cuello y un retoque para afinar y levantar su nariz. Quedó muy conforme con los resultados y tuvo una buena recuperación. Su objetivo a la hora de someterse a una nueva intervención fue quitarse el exceso de grasa, estirarse la piel y los músculos del cuello para tensarlos y lograr así una mejor apariencia, según informa la Revista Caras.
"La estética es fundamental. Mucho más aún, cuando te dedicás al show business y tenés tanta exposición. Siempre fui cuidadosa, detallista. Nunca estuve en contra de las cirugías, pero es importante ser fiel a tus rasgos e impresiones", expresó antes de entrar al quirófano Susana.