La actriz que hace de Juana en "Valientes" hizo un culto a la locura. Con una composición impecable en la novela de El Trece, nadie duda que Juana está más loca que una cabra, pero además nadie se anima a pronosticar sus próximos pasos. Ahora, en el tramo final, coquetea con el suicidio.
La última novedad en la loca cabeza de Juana Gómez Acuña es que su madre muerta, que dejó este mundo en un trágico incendio en el que estuvo involucrada su hija siendo una niña, ahora se le aparece a la loca de "Valientes" aconsejándole que deje a su padre, que deje a su familia, que deje todo y que vaya con ella.
El personaje de Wexler terminó de perder el ancla con la realidad cuando se enteró que su archi enemiga, Alma Varela (Julieta Díaz) es en realidad su hermana. Con una relación casi edípica con su padre, Juana desvaría constantemente.
Y no es para menos: a lo largo de la trama vio morir a su amado esposo (Luciano Castro), lo vio vivo cuando todos lo creían muerto y lo abrazó cuando se dio cuenta que había resucitado.
Los personajes malos y locos ya son una marca registrada en la actriz, ya que en 2008, en "Son de Fierro", compuso a la chiflada Rita, responsable entre otras cosas de matar al cieguito que interpretaba Mariano Martínez y de torturar y secuestrar a la mitad de los personajes de la tira.
Pero Rita y Juana son diferentes: la primera enloqueció por la imposibilidad de estar con su ser amado, pero la segunda comenzó la historia de "Valientes" con varios problemas. Como dicen en el barrio, Juana "no tenía los patitos en fila" desde chica, en cambio a Rita "se le fueron desordenando a medidas que avanzaba la historia".
¿Cómo terminará su historia?