Entonando una docena de sus irreverentes canciones, entre ellas Alas rotas , que dedicó "a todos los enemigos del pueblo cubano", Chao rindió homenaje nada ortodoxo al revolucionario argentino-cubano, en el 42º aniversario de su muerte en Bolivia.
El músico enloqueció durante unos 50 minutos a jóvenes cubanos y extranjeros, con camisetas con la imagen del Che, que saltaron y corearon sus canciones, incluidos sus éxitos Clandestino y Desaparecido .
El recital, primero de dos que dedicará en la isla al Che, arrancó con unas 5.000 personas, pero hacia la medianoche, se sumaron noctámbulos y retrasados por problemas de transporte, hasta llegar a 20.000, según medios locales.
"Buenas noches Cuba, es un honor estar contigo esta noche", dijo el músico al inicio del concierto, que repetirá en Santa Clara -280 km al este de La Habana-, bautizada como la Ciudad del Che y donde reposan sus restos mortales y de varios de sus compañeros de guerrilla en Bolivia.
"Es lindo, muy simbólico ver a un artista comprometido como Manu Chao cantar al Che en esta escalinata, escenario de luchas estudiantiles contra la dictadura de Fulgencio Batista (1958-59)", declaró emocionada Lisset de la Torre, una abogada de 35 años, quien vestía una camiseta blanca con la imagen de Guevara.
Para Gloria Carmona, de 24 años, fue "un merecido homenaje al eterno guerrillero" y "otro gran regalo", solo 19 días después de que el cantante colombiano Juanes "estremeciera la Plaza de la Revolución" con su polémico y multitudinario concierto Paz sin Fronteras .
Sin el despliegue mediático de Juanes, Chao saludó a jóvenes que agitaban banderas de Argentina, Brasil, Ecuador y Venezuela, mientras que en dos de los carteles que portaban se leía: "Maldito el soldado que dispare contra su pueblo" y "Vení y marchemos todos unidos por la democracia de nuestra Honduras".
Durante la velada, el diseñador polaco Jacek Wozniak, ilustrador de las portadas de todos los discos de Manu, y artistas cubanos pintaron cuatro murales alegóricos al Che detrás del escenario.