La historia de amor entre (27) y (29) nació de una forma bastante disparatada. En 2013, ella se lucía en Sos mi hombre con el personaje de la boxeadora Rosa Montes y él era jugador de la Roma de Italia, cuando mágicamente sus caminos se cruzaron.
"Me suena el teléfono y me dice: 'Quería saber si me podés ir a buscar el lunes a Ezeiza'... Con su representante Darío inventaron un problema judicial en la Argentina, que salió en todos los diarios, en Roma, todo... El chico viajó 48 horas a Buenos Aires para conocerme".
La actriz y el futbolista comenzaron a conocerse virtualmente, hasta que nació el amor y las sanas locuras para poder verse personalmente. "No podíamos dejar el chat. Tenía el teléfono recalentado, enchufado… Nos enamoramos por WhatsApp", sostuvo Jimena en nota radial con , el programa de Andy Kusnetzoff.
La charla transcurría amena, con el plus de simpatía habitual de la actriz, hasta que Barón sorprendió a todos con la confesión de la mentira ¿piadosa? que utilizó Daniel Osvaldo para recibir la autorización de su club para ... y así poder conocerla.
"Yo estaba haciendo una nota para la revista Gente, cuando me suena el teléfono. Me alejo un minuto para hablar, y me dice: 'Quería saber si me podés ir a buscar el lunes a Ezeiza'. ¡Imaginate! Yo quedé como de qué me estás hablando. Con su representante Darío, a quien le agradezco el esfuerzo, inventaron un problema judicial en la Argentina, que salió en todos los diarios, en Roma, todo. Y el chico viajó 48 horas a Buenos Aires para conocerme. Dijeron que tenía que venir de urgencia. Estaba en plena pretemporada", confesó Jimena, tras asegurar que con ese gesto cayó rendida a sus pies. Tanto, que dejó la novela de Pol-ka para seguir los pasos de su hombre, hoy, el padre de su hijo, Morrison.
¡Loco... de amor!