Con peritos presentes de las partes intervinientes (Paloma Fort, Marta Fort y el Sanatorio de la Trinidad), el jueves se realizó en la Morgue Judicial la autopsia al cuerpo de Ricardo Fort. La denuncia por presunta mala praxis desembocó en una investigación judicial, que comenzó con el secuestro de la historia clínica del empresario fallecido, y la posterior exhumación de sus restos, que descansaban en un cementerio privado de Pilar.
Según informa la agencia Télam a través de los primeros datos que pudieron obtener los especialistas, al momento de su muerte, el 25 de noviembre, Fort padecía un "cuadro infeccioso generalizado". Según fuentes judiciales, los médicos además encontraron un foco infeccioso en su rodilla izquierda, que fue operada de ligamentos cruzados, y también en una prótesis que llevaba en la columna, aunque advirtieron que aún es prematuro saber si esto le causó la muerte.
Los resultados finales estarán dentro de 40 a 50 días, además de los informes histopatológicos. Y los médicos le advirtieron al juez de Instrucción Diego Sluptzki, que como se sometió al cuerpo a conservación en base a formol, podría haber una alteración en las muestras sometidas a estudio.