Pasaron cuatro meses desde que Luciana Salazar (37) se convirtió en madre de Matilda a través del método de vientre subrogado, pero la maternidad no es un asunto terminado en su vida. Es que la modelo conserva en Miami quince óvulos y cinco "embriones femeninos" (fecundados por el mismo donante anónimo) congelados, y no descarta volver a ser mamá: "Claro que me gustaría tener otro bebé, del modo en que Dios decida darme esa chance".
"Me hubiese gustado tanto llevar en mi vientre a Matilda… Por eso, un embarazo, es algo que no descarto".
Por otra parte, Luciana admitió en una nota con la revista Gente que le gustaría intentar llevar adelante un embarazo: "¡Sería una bendición! En su momento, recurrir a la subrogación, tuvo que ver con un contexto muy particular de incertidumbres emocionales y hasta físicas, porque padezco trombofilia. Cargaba tal trauma con el deseo de tener un hijo, que con la mínima posibilidad de riesgo, entraba en pánico. Me hubiese gustado tanto llevar en mi vientre a Matilda… Por eso, un embarazo, es algo que no descarto. Si el día de mañana, mi cuerpo responde y mi marco afectivo es el propicio, ¿por qué no? Aprendí que la subrogación no es la panacea. A la distancia también se sufre. Agradezco tanto el cuidado amoroso que la subrogada le dio a mi hija…".
"El día de mañana, cuando finalmente la edad no me ayude o simplemente decidiera no volver a ser mamá, lo más seguro es que ayude a otras mujeres..."
Por último, Luciana Salazar reflexionó sobre el destino que tendrán sus óvulos y embriones en caso de que ella no los utilice: "Se mantienen congelados mediante un costo mensual. Según el reglamento de la clínica, si algo malo sucediese, los óvulos mueren con la madre en el caso de no haber sido autorizada la donación. Es un tema muy sensible. Siempre fui pro-vida y medito mucho al respecto. Al día de la fecha solo puedo tener la certeza de que 'hoy' recurriría a la donación en caso de que alguien de mi núcleo más íntimo lo necesitase. Y digo 'íntimo' porque, si bien madre es quien dedica su amor en la crianza, no dejarían de ser mis hijos, con mis genes. El día de mañana, cuando finalmente la edad no me ayude o simplemente decidiera no volver a ser mamá, lo más seguro es que ayude a otras mujeres… Pero te repito, es un tema que aún proceso, que me ocupa a conciencia."