Esta semana, volvió a hacer público que su marido, Matías Defederico, recibió de supuestos hinchas de Independiente, club del que el futbolista se desvinculó en 2012 y demandó por falta de pago de sueldos.
La delicada acusación de la modelo llegó a Desayuno Americano, programa en el que Pamela David abordó el tema y ahondó en las internas entre los dirigentes, los barrabravas y los clubes. Pero el resultado del debate no fue el deseado: Pablo Duggan y Flavio Azzaro sumaron sus voces al análisis de un modo tal que sus ideas no quedaron del todo claras ya que el ida y vuelta de interrupciones fue constante.
"¡Hablen de a uno, no se entiende!", exigió la conductora, mientras Flavio no le daba espacio a Pablo a que emita fluidamente su opinión. Y viceversa.
A los pocos minutos, y al ver que los panelistas seguían con la dinámica de pisarse al aire, Pamela se puso seria y exclamó: "¡Se pueden dejar de interrumpir! Me ponen nerviosa", dijo David con el fin de moderar y hacer entendible el debate.
¡Hagan caso, muchachos!