Las imágenes de Laurita Fernández y Eugenia "la China" Suárez juntas afuera del hospital Cemic donde en octubre pasado debieron operar por una hernia inguinal a Rufina (6) -la hija de 6 años que Nicolás Cabré tiene con la actriz- fue la primera prueba de que el vínculo entre la ex del actor y la actual pareja es excelente.
"A la China la conocí en el cumple de Rufi, que ella me invitó. Es todo con mucha normalidad. Creo que cuando los compañeros de los padres tratan bien a sus hijos y son ubicados, es lo mejor que puede pasar".
Ahora, indagada por la primera vez que conoció a la China, Laurita se sinceró en un móvil para Intrusos: "No recuerdo bien, pero fue antes de la operación de Rufi... ¡fue en su cumple! Fue en el cumple de Rufi, que ella (la China) me invitó. Es todo con mucha normalidad. Creo que cuando los compañeros de los padres tratan bien a sus hijos y son ubicados, es lo mejor que puede pasar. A mí me pone feliz su felicidad", comenzó diciendo.
Además, la bailarina habló de sus deseos de agrandar la familia con Cabré: "Me dan ganas desde que lo conocí a Nico. Me dan ganas con él, sea más pronto o más lejos. Las ganas me las despertó la relación. Nunca fui muy Susanita de querer hijos a costa de cualquier cosa. La verdad es que no pensaba en eso".
"Hoy tengo otras prioridades antes. Quiero seguir trabajando, hacer otras cosas. Pero sí sé y tengo la tranquilidad que si llega en el momento que llegue, si es con Nico está todo bien", cerró, dejando la puerta abierta a la posibilidad de ser madre por primera vez junto al galán.