María nació en 1976. Es una chica común pero con una historia de vida diferente. Diferente porque a los 28 años descubrió que sus padres biológicos no eran quienes la habían criado. Diferente porque María no sabe cuándo nació, y mucho menos dónde. Diferente porque tras cinco años de lucha y búsqueda aún no sabe cuáles son sus raíces.
Ante la desesperación y la necesidad de saber de dónde viene, María llevó su búsqueda a la web: , y confió en las redes sociales de Facebook y . Hoy todos quieren conocer su historia e intentar ayudarla.
Cuando tenía 28 años María terminó una relación amorosa y decidió comenzar terapia. Al finalizar la primera sesión, María le confesó a su psicóloga que siempre tuvo la fantasía de que era adoptada. ¿Un presentimiento? Todavía no sabe muy bien por qué le dijo eso a su terapeuta, sólo tiene claro que tras esa sesión comenzó a buscar nuevamente fotos de su niñez.
Así fue como revolviendo imágenes de su pasado encontró una fotografía donde aparecía su madre adoptiva con ella de bebé. Lo que la sorprendió es que en aquella foto debería aparecer con panza de embarazada porque María tiene un hermano un año más chico que ella. Esa foto fue el detonante que la hizo comprender que si su hermano era adoptado, ella también podría serlo.
Luego del shock llegó el momento del enfrentamiento con Celia, su madre adoptiva. "Le dije que gente de Abuelas de Plaza de Mayo me había ido a buscar diciéndome que no era hija de Celia y Alfredo cuenta- le mentí porque estaba segura que si no lo hacía me iba a seguir ocultando la verdad", reconoce María. De este modo, la mujer que la había criado le confiesa lo que ella presentía: María y su hermano eran adoptados.
Conocer esa verdad poco la ayudó: Celia le dijo que la habían ido a buscar a una casa en el barrio de Belgrano, pero que ella no sabía nada más porque adoptivo de María que había muerto 15 años atrás- se había encargado de todo.
Después de la poca ayuda de Celia, María decide ir al Registro Civil. En la partida de nacimiento figura que nació el 10 de mayo de 1976. En plena dictadura militar, Alfredo Daniel Videla y Celia Elena Elguera Barros de Videla, sus padres adoptivos, apropiaron a María de manera ilegal. En la partida no figura quiénes fueron sus padres biológicos, queda claro que la adopción fue ilícita.
El dato que sí pudo obtener María en el Registro Civil fue el nombre de : Marta Beatriz Rosignoli. Sin embargo, aún no pudo contactarla, pero espera que alguien le pueda aportar algún dato sobre la mujer que la vendió. Sabe que esa persona es quien puede desenterrar gran parte de su historia verdadera.
Todos los hechos parecen apuntar a que María es hija de desaparecidos, sin embargo, los estudios de ADN dieron negativo después de ser comparados con los datos del Banco Nacional de Datos Genéticos de familiares de niños desaparecidos, aunque todavía no descarta esa posibilidad.
No está enojada con quienes fueron sus padres de crianza, ya que cree que hasta cierto momento de su vida cumplieron ese rol. "No tuve una infancia infeliz", recuerda. "Sólo quiero saber de dónde vine, quiénes eran mis padres, cómo pensaban".
María creció con la incertidumbre de no pertenecer, de no ser quien le decían que era. Preguntaba porqué no había fotos de su madre embarazada de ella y su padre, fotógrafo, se justificaba diciendo que daba mala suerte fotografiar a las embarazadas.
María sabe que aún le falta un largo camino por recorrer, que aún quedan preguntas por responder, pero sabe que no está sola porque hoy su lucha se convirtió en la de todos.