El escenario es uno solo. Pero las emociones que se reflejan en las caras de los pasajeros y los familiares que van a buscarlos o a despedirlos son muchas y todas llevan consigo una emotiva historia.
Así fue uno de los casos con el que Hola y Adiós –el nuevo docu-reality de Telefe- inició su primer capítulo, bajo la conducción de Michel Noher.
“Mi hija tiene 12 años y por cuestiones familiares se fue a vivir con su mamá a Perú. Allá se radicó, empezó a estudiar y ahora con su madre decidimos que venga sola, es la primera vez que lo va a hacer".
Son las 14.30 de una tarde que para muchos es un día más. Sin embargo, para un hombre que refleja la ansiedad de volver a ver a su hija tras casi 5 años desde que partió a Lima (Perú), es un momento especial. “Estamos esperando a mi hija Sara”, adelantó el entrevistado, acompañado de su hermana y madrina de la pequeña, que lleva en sus manos un gran ramo de flores.
Con un cartel con una enorme foto de su niña y una frase que dice: “Bienvenida Sara”, esta persona que en el aeropuerto de Ezeiza llamó la atención del conductor, contó su historia: “Mi hija tiene 12 años y por cuestiones familiares se fue con su mamá que es peruana. Allá se radicó, empezó a estudiar y ahora con su madre decidimos que venga sola, es la primera vez que lo va a hacer. Ella estaba en el avión entusiasmada. Hubo un percance a nivel salida, una cuestión de papeleríos en el que supuestamente mi autorización no tenía validez. Pero Dios es grande y una persona jerárquica de allá le firmó por excepción la salida, así que por suerte me dijo: ‘papá, viajo’. Una hora antes me estaba diciendo ‘papá, no viajo’ y no paraba de llorar”, relató.
“Sara se fue con 7 años (...). Es como que al principio no te das cuenta del golpe. Sí en el transcurso de los días, de levantarte y no verla, escucharla. Eso te empieza a generar situaciones que a mí, en lo personal, me afectaron muchísimo: desde lo psicológico hasta lo laboral. Fue muy fuerte y más que ella es hija única. Ella es mi vida, es todo, es el aire que respiro. Aunque la tenga a la distancia, sé que ella es prioridad en mi vida”.
“Ella se fue con 7 años. Fue una situación, a nivel familiar, muy difícil porque nos costó a todos desde todo punto de vista. Por el vínculo que había, porque ella nació en Argentina, es argentina. Yo me casé con su mamá y nos vinimos a vivir a Buenos Aires. Lamentablemente la pareja no funcionó, se hizo lo posible por recuperar pero en definitiva cuando hay estos problemas, uno tiene que pensar en los chicos. La nena era muy chiquita y me parecía que lo que correspondía era irse con su mamá”, agregó.
Luego, dio detalles de cómo fue sobrellevar la partida de Sara: “Es como que al principio no te das cuenta del golpe. Sí en el transcurso de los días, de levantarte y no verla, escucharla. Eso te empieza a generar situaciones que a mí, en lo personal, me afectaron muchísimo: desde lo psicológico hasta lo laboral. Fue muy fuerte y más que ella es hija única. Ella es mi vida, es todo, es el aire que respiro. Aunque la tenga a la distancia, sé que ella es prioridad en mi vida”.
Por otro lado, recordó cuáles habían sido las últimas palabras de la menor antes de volar a otro país: “El día que se fue, Sara me dijo: ‘papá, yo soy chiquita y tengo que acompañar a mi mamá. No tengo elección. Más explicación que eso no te puede dar. Después me dijo ‘papá, te voy a extrañar. Vamos a hablar’. Sufrí horrores, subí mucho de peso, tuve ataques de pánico y de a poco, lo fui superando”.
En ese momento, apareció en escena la protagonista de esta historia que buscó por todos lados a uno de sus seres más queridos. Al verlo, un grito invadió el lugar de mucha emoción: “¡Papáaaa!”, atinó a decir mientras corrió hacia su papá y selló el momento con un efusivo abrazado que fue acompañado de lágrimas y felicidad.
¡Mirá una de las historias más conmovedoras del debut de Hola y Adiós, el docu-reality de Telefe sobre el aeropuerto de Ezeiza!