Cinco jugadores: un arquero vidente y cuatro jugadores de campo no videntes.
Los partidos están divididos en dos tiempos de 25 minutos cada uno, con un entretiempo de 10. La cancha es de cemento o mosaico y siempre tiene que estar al aire libre debido a la acústica. Las medidas son de 40 metros de largo por 20 de ancho y dispone de paredes en los costados.
El arquero, el técnico y un guía que se ubica detrás del arco rival son los que orientan a los jugadores. Además la pelota posee cápsulas sonoras. El juego es dirigido por dos árbitros: uno principal y un asistente.