“Todavía no caigo, me parece un sueño estar acá”. Así resumió la modelo Paula Chaves, subcampeona de la competencia, su paso por Bailando por un Sueño, el programa de mayor rating del año televisivo.
Con el público ovacionando cada uno de sus bailes, la modelo, que perdió la final con la Mole Moli, se lució en los cuatro ritmos (pop latino, merengue, reggaetón y axé) con su frescura característica, pero con una cuota extra de nerviosismo.
Así, cuando Marcelo Tinelli le preguntó cómo había vivido los últimos días, Paula bromeó alrededor de las cábalas que tenían con Peter Alfonso para que “todo salga bien”.
Para ella fue una noche movilizadora, con un video emotivo de su familia, con el aliento del público y, por supuesto, con el apoyo incondicional de Pedro, su flamante novio. Al final, entre lágrimas incontenibles, sólo agradeció: “Fue el mejor año de mi vida, y nunca lo voy a olvidar. Gracias a todos, y principalmente a mi familia por bancarme en todo momento. A mi papá, a mi mamá, a mis hermanos, a la gente de Lobos. Los amo a todos.”
Al final, la modelo perdió con la Mole Moli por una mínima diferencia. Pero seguro ganó, y mucho pensando en el futuro de su carrera. Ahora llegará el tiempo de las tapas de las revistas, las ofertas artísticas y ¿el casamiento con Peter? ¿O acaso será el turno de una nueva vedette?