Como en las paradojas, todo está armoniosamente descolocado en la vida de Micah P. Hinson. Su voz grave puede ser comparada con la de Leonard Cohen, Nick Cave o Tom Waits, pero contrariamente a lo que uno podría imaginarse, Hinson no es un veterano aguardentoso, es un joven de apenas 25 años, dos más de cuando grabó su primer disco The Gospel of Progress y disparó toda la asombrosa aspereza de su garganta en la "noisy" On my way. Lo primero que parece estar fuera de lugar en la vida de Micah P. Hinson, entonces, son afortunadamente sus cuerdas vocales.
Otro gran contraste es que para su corta edad, el singer/songwriter nacido en Memphis y residente en Abilene, Texas, ha vivido turbulencias propias de una caída en picada. A los 19 años, enamorado de una mujer mayor que él, modelo de Vogue y viuda de una estrella de rock de su ciudad, se hizo adicto a los narcóticos, falsificó recetas, se convirtió en drugstore cowboy, y pasó una temporada en la cárcel.
Pero, para él, la desgracia esgrimió su "lado B", una cara amigable que lo condujo por mejores rumbos. Al salir de prisión, Hinson se puso a componer y volcó toda esa dolorosa experiencia en canciones con letras autobiográficas. Con la ayuda de su amigo John Mark Lapham, del grupo The Earlies, el demo de uno de los temas The Posibilities llegó a la BBC y el sello inglés Sketch Book Records se interesó inmediatamente. "Estaba siendo mantenido por una mujer en Austin, desempleado, y el sello me llamó de la nada, me contrató y me compró un pasaje a Londres cuenta Hinson a Ciudad.com-. De allí fui a Manchester y registré el álbum The Gospel of Progress, en los Airtight Studios con The Earlies como banda. Trabajamos por menos de dos semanas".
El disco, con canciones de folk torturado y country noir, fue elegido mejor álbum de 2004 en varias encuestas, especialmente publicaciones inglesas como Uncut, The Independent, Time Out y la BBC. Hinson recorrió el mundo tocando con Iron & Wine, Antony & the Johnsons, Devendra Banhart, The Arcade Fire, KT Tunstall y Richard Hawley.
Después de editar el EP The Baby and The Satellite y de comenzar un proyecto paralelo junto a John Mark Laphan llamado The Late Cord, Hinson acaba de sacar su segundo LP Micah P. Hinson & the Opera Circuit, disco que tuvo que grabar en su casa porque una lesión en la espalda le provocó un dolor constante y lo llevó al quirófano.
Leí que dijiste que The Gospel of Progress surgió de un dolor emocional y The Opera Circuit de un dolor físico. ¿El sufrimiento te inspira?
No quise decir que el sufrimiento me inspira. No necesito cierta clase de dolor en mi vida para hacer música. Es sólo que por alguna razón la vida me encuentra en lugares extraños atravesando cosas extrañas y al fin del día, yo sólo escribo sobre lo que sentí y presencié. No tienen que estar atadas al dolor. Honestamente no me importaría tener una vida normal, ocasionalmente. Pero este es el apremio con el que los dioses me agraciaron, entonces hago lo mejor que puedo con lo que tengo.
¿Cómo fue el incidente en el que te lesionaste la espalda?
Estábamos celebrando la noche de Robert Burns, un antiguo compositor y poeta escocés. Mis amigos y yo estábamos borrachos en un hotel. Había gaitas y toda esa clase de cosas. Luego fuimos a la casa de mi amigo, el que toca la batería principal en The Opera Circuit. Yo estaba de rodillas con los brazos hacia arriba apoyados en un escritorio cuando él vino y me golpeó en la espalda. Sentí un dolor y por dos semanas estuve prácticamente lisiado. Estuve de gira y, finalmente, hace un año, me operaron. No me hizo mucho bien y todavía tengo un dolor constante. Los doctores dijeron que la cirugía no estuvo bien hecha y debo soportar otra pronto. ¡Bastardos!.
MPH & The Opera Circuit fue grabado en tu casa. ¿Cómo influyó eso en el sonido del disco?
Tuvo un fuerte impacto. Inicialmente supuse que trabajaría con un productor o al menos en un estudio adecuado, pero no fue posible con mi salud de la manera que estaba. Le dije al sello que necesitaba comprar equipamiento para grabar y aceptaron. Pasé mucho tiempo en casa haciendo canciones, convocando gente a la ciudad y esa clase de tareas que fueron muy difíciles con la espalda jodida. Pero al final quedamos todos contentos y todavía lo estamos, con el disco y las canciones que hicimos.
¿Cómo fueron las sesiones? ¿Qué es lo mejor que pasó?
El azar en las sesiones era lo mejor. Nosotros solamente nos sentábamos alrededor de mi comedor con nuestras cabezas pegadas a los parlantes, pensando o imaginando que debíamos hacer. Creo que lo más extraño fue conseguir la ayuda del señor Eric Bachmann. Estuve escuchando su música muchos años, es mi héroe. Nos conocimos en un tour que hicimos juntos por el medio-oeste norteamericano. Un día me llamó para ver cómo andaba y lo invité a trabajar en el disco. Él estaba yendo desde Austin, Texas hasta Denver, Colorado y yo estaba en el medio. Entonces vino y le dí 17 canciones, pensando que les haría algunos detalles, pero pasó un mes y volvió con las creaciones más sorprendentes (Bachmann hizo todos los arreglos de vientos y cuerdas del disco). Tuve que sacar un poco del álbum porque realmente era demasiado. No se hacen más discos con ese sonido. Algún día editaré solamente las partes de cuerdas y vientos para hacerles justicia. Él es un hombre brillante, un genio, el mejor.
¿Cuándo decidiste agregarle armonías a tu voz hechas por vos mismo?. Eso ya es una característica de tu estilo y le da profundidad a las canciones.
Creo que yo canto todas las armonías porque no hay otra persona que las pueda hacer. Busqué que fueran diferentes a las segundas voces de The Gospel of Progress, que son más calmadas y complejas. Busqué algo más descuidado y bajo. También suena extraño cuando hay 15 de mis voces al mismo tiempo.
¿Te imaginaste que tu música iba a ser tan respetada y exitosa?
No, fue todo una gran sorpresa. Estuve escribiendo canciones por mucho tiempo, desde muy chico, pero nunca pensé en editar un disco, mucho menos en tener éxito con lo que hago. No se me respeta porque sea bueno. Es solamente porque la gente se toma el tiempo para apreciar lo que hago. Eso es todo para la gente que escucha. Nada de esto es por mí Yo soy solo una pequeña parte de un gran esquema.
¿Cuál fue la idea sobre la que trabajaron con John Mark Laphan para crear el sonido de The Late Cord?
En los comienzos de The Earlies, ellos pensaban si usarme a mí o a Brandon Carr, quien ahora canta para ellos. John Mark y yo hicimos algunas canciones juntos con un sentimiento diferente al de ellos, màs a la manera de un esquema Earlies. Entonces después de que los Earlies se formaron y ambos tocamos en bandas, decidimos intentar editarlo. Se lo mostramos a 4AD y nos contrataron. Ahora, estamos trabajando en un LP pero falta un poco para que esté terminado. Estoy malditamente ocupado.
Leí que tu familia se alejó de vos cuando tuviste ese problema con los narcóticos y la ley. ¿Se recompuso la relación?
Sí, estamos realmente bien. Ellos son la gente más sorprendente que he conocido. Los amo y ellos me aman. No fue como dicen. Solamente no les gustaba lo que yo había elegido hacer con mi vida. Yo era un pequeño bastardo destructivo.
¿Crées que los tiempos difíciles terminaron?
Lo dudo. La vida nunca da del todo. No lo creo. Si no es una cosa, será otra. Los tiempos difíciles nunca se van, solamente cambian su forma. Pero yo estaré listo para los problemas. Siempre lo estoy.