Ivan de Pineda se luce como conductor de Resto del Mundo y ya renovó contrato para el año que viene con El Trece. El modelo sorprende con el nivel de conocimiento de cultura general que tiene y del modo en que encara sus recorridos por el mundo.
Entre esas cosas, De Pineda probó variadas comidas exóticas. Y dio ejemplos en una entrevista con el diario Perfil. “Cuando en Africa me trajeron una cabeza de cabra cortada transversalmente, hervida sólo un minuto y servida con palillos: adorable. O cuando me ha tocado comer una serpiente recién exprimida y con el tipo que me daba el corazón porque era il bocatto di cardinale de su cultura: sólo para los invitados de honor”, comentó.
De todas formas, el conductor no desprecia nada. “En mi casa me enseñaron que cuando uno se sienta en la mesa de alguien, come lo que le ponen. El primer contacto por ejemplo con el mojojoy, una larva gigante del Amazonas… Y, si no estás acostumbrado… y bueno… Si la señora tuvo la tremenda bondad de invitarme a su casa y sentarme en su mesa, probar lo voy aprobar”, afirmó.
Sobre su experiencia con la pobreza y otros aspectos menos felices de los países que visita, De Pineda tiene una particular y destacable visión. “No me gusta hablar de las cosas feas que veo. Si bien es importantes cambiarlas, no me gusta la morbosidad. He aprendido a apreciar cada uno de los países por lo que tienen de especial para ofrecer”.