La noticia del jubilado que quedó en arresto domiciliario por el delito de “homicidio agravado” tras matar a uno de los delincuentes que habían ingresado a su casa de Quilmes a robarle dividió a la opinión pública.
Y mientras continúa la polémica entre quienes se indignaron por la determinación de la Justicia y quienes entienden que la medida fue justa, familiares de Franco Moreyra, el joven abatido, se acercaron al domicilio de Adolfo Ríos a expresar su furia y dolor por la muerte del joven de 26 años.
"Mi hijo se quedó sin papá gracias a este señor. Yo soy la mamá del hijo de Franco”, le dijo una chica, visiblemente conmocionada, a Liliana Caruso, cronista de América Noticias.
"Mi hijo se quedó sin papá gracias a este señor. Yo soy la mamá del hijo de Franco (Moreyra)".
A los gritos y entre exclamaciones confusas, el grupo reclamó por “la verdad”, pero cuando notera les propuso el micrófono para contar su versión no lo hicieron y se alejaron del lugar.
Aparentemente, estas personas querían decir que el delincuente no habría sido disparado dentro del domicilio del herrero, como aseguran sus abogados, sino en la calle.