Robbie Williams afirmó que después de consumir marihuana, una "droga hermosa" para él, se le abría el apetito y que por eso no paraba de comer. Así que el cantante de origen británico se decidió y dejó de consumirla porque "no se mezcla bien conmigo".
Según publica ADN Argentina, sus declaraciones provocaron gran revuelo en los grupos anti-drogas, que afirmaron que el cantante "glorifica" la marihuana.
"¿Me vieron el año pasado? ¿Me vieron como estaba? Sí, fue el año del apetito 2009", declaró irónico a la revista Radio Times.