Embarazada de siete meses, Vicky Xipolitakis (31) dejó su vida en Nueva York para dar a luz a Salvador, el hijo que espera con el empresario Javier Naselli (52), en la Argentina.
Radiante por la dulce espera, la exvedette fue a Morfi, todos a la mesa para hablar de su gran momento personal y expuso la incomodidad que siente cuando le tocan -de improviso- su vientre maternal, como hizo tiernamente Zaira Nara al recibirla en el programa.
"El cuerpo me cambió, pero me veo y me encanta. Nada me importa más que mi bebé. dejé mi ego en un segundo plano. Como y me doy todos los gustos".
"Yo ya se la toqué, ¿pero sos de esas mamás que les molesta que les toquen la panza?", le preguntó la modelo y conductora, sin imaginar la respuesta espontánea de Vicky: "Sí, un poco me molesta… Cada vez que me la tocan, pongo las manos, es como una protección. No me gusta ser así, pero... Es como que es mío mi bebé y no quiero que nadie lo toque. Lo amo... Ya siento las patadas y cuando tiene hipo", aseguró la Griega, aferrada a su bella panzota.
Sobre los cambios físicos que vienen de la mano de la maternidad, Xipolitakis se manifestó a gusto y sin perder de vista el bienestar de su hijo: "El cuerpo me cambió, pero me veo y me encanta... Nada me importa más que mi bebé. Dejé mi ego en un segundo plano. Vivo por mi bebé. Como y me doy todos los gustos".