Una de las sorpresas de la noche de los Martín Fierro fue la coronación de Juana Viale como mejor conductora, tras dos temporadas en las que reemplazó a su abuela Mirtha Legrand al frente de sus dos ciclos. Emocionada, se lo dedicó a su familia y a su amiga, la actriz Victoria Césperes, que falleció hace un año.
La emoción de la actriz fue por partida doble ya que, además de que el mundo del espectáculo se volvía a encontrar en “la gran fiesta de la televisión”, ella se hizo con el premio frente a toda su familia.
Tras abrazar a su hija Ámbar, a su hermano Nacho, a Marcela Tinayre, y a su abuela, que se emocionó hasta las lágrimas, Juana subió al escenario a recibir su estatuilla, notablemente conmocionada.
JUANA VIALE SE EMOCIONÓ HASTA LAS LÁGRIMAS AL GANAR SU MARTÍN FIERRO
“Buenas noches, nunca pensé en ganarme un Martín Fierro en la conducción, lo mío es la actuación, y las cosas de la vida me llevaron adonde estoy. Voy a agradecer al público que me acompañó en estos dos años”, dijo Juana.
“Fue meterme en un personaje y remar algo que yo desconocía pero que sí heredaba. Soy una agradecida porque tengo a casi toda mi familia en la mesa: a mi madre, a mi abuela, a mi hermano, que siempre estaba ante mis ataques de pánico al salir de escena”, explicó.
“Quiero dedicárselo especialmente -sin llorar Juana- a mi amiga Victoria Césperes, que hace un año está volando por algún lugar de este universo. Y estoy agradecida y feliz de estar acá parada con este premio que me costó muchísimo, muchísimo, muchísimo”, cerró la mejor conductora de la TV.