Alexander Caniggia se quedó sin su hermana en el certamen (para los que no saben, Charlotte quedó eliminada tras perder con Cristian U), pero no por eso está menos firme: Marcelo Tinelli le sigue dedicando muchos minutos a su previa y el jurado lo sigue elogiando por su destreza en el baile.
Todo eso demostró en la última gala, cuando sorprendió con un perfecto baile del caño, y además con una perfecta charla con el conductor… de esas que lo dejan a él como una persona poco ocurrente, por decirlo de algún modo.
Es que al hijo de Mariana Nannis se le dan una y más oportunidades, pero le cuesta ese temita de andar respondiendo rápido. Y eso que esta vez la consigna era más que fácil. “Decime ocho cosas grosas que hagas”, le pidió el conductor. ¡Y no sabía qué decir!
“Tengo laburos grosos”, dijo sin dar detalles. Varios minutos después se le prendió la lámpara, y lanzó: “San Lorenzo”. Con un Tinelli parado cual paciente esperando en una sala de espera, el concursante siguió tirando algún que otro concepto, aunque tardó varios minutos en definirlos. “¡Tirame un centro!”, pidió sin esperanzas y abatido el conductor, hasta que lo logró. Aleluyaaaa.