El boxeador, el eterno sentenciado de “ShowMatch”, sorprendió en el Acquadance. Y Moria Casán también, cuando se tiró a la pileta y su pelo quedó flotando en el agua.
“La Mole” llegó a la gala del Acquadance con fama de poco amante del agua y con los antecedentes de su “patadurez” que lo deja siempre sentenciado y, la mayoría de las veces, compitiendo con alguien en el teléfono. Pero el agua le sentó bien a Moli y terminó la noche con el mayor puntaje.
En la previa, el boxeador volvió a hacer un “culto a la mugre” al afirmar que ni siquiera obliga a sus hijos a bañarse. “Yo le digo a los chicos ¡Si no querés, no te bañes!; ¡Pero la ‘Negra’ los lleva a la rastra!”
Pero en medio de la charla, Tinelli notó que “La Mole” también tenía un costado metrosexual, ya que notó que se había cortado las uñas y le preguntó si pasó por la pedicura: “Yo soy mataco, culiao, mirá que voy a usar pedicura”, para rematar su história de higiene contó con gracia su experiencia en un sauna: “me metí ahí, me quedé quieto y me cagué de calor”.
Finalmente, al ritmo de “Amazing” de Aerosmith, “La Mole” y su bailarina dejaron a todos boquiabiertos, en especial al jurado, que lo premió con un total de 37 puntos, algo inédito en el tosco boxeador.
Pero la frutilla de la noche en la gala del Acquadance estuvo a cargo de Moria Casan, que para no ser menos que Graciela Alfano se tiró al final de ShowMatch en las piletas montadas en el estudio, con tanta mala suerte que perdió parte de sus extensiones en el agua.