En estos tiempos actuales, donde la palabra solterón o solterona quedó totalmente en desuso para pasar a utilizar el vocablo Singles (personas solteras, generalmente por elección, que buscan la satisfacción personal más allá de la pareja), muchas empresas intenta acercarse a ellos. Y lo hacen a través de servicios y productos cada vez más diversos y que no dejan de sorprender.
Es así como en la Web es fácil encontrar movidas que los reúna a través de diferentes fines tales como realizar viajes exóticos, cicloturismo, actividades al aire libre, y más. Todo aquello que la persona que viva sola, sin cargas familiares y con un poder adquisitivo medio-alto, pueda desear y realizar.
Hasta acá todo pareciera ser naif y hasta posiblemente "aventurero". Inclusive puede ocurrir que detrás de todo interesado en estas prácticas también existan ganas de conocer a un posible candidato a la luz de la luna, en una cabalgata nocturna o en una bicicleteada urbana.
Sin embargo, aunque nuestra capacidad de asombro pareciera estar cada vez más colmada, un nuevo ingenio saldrá a la venta en los Estados Unidos en el mes de febrero, y a mediados de año en el resto del mundo.
"The Straits Times", el diario más importante de Singapur, publicó una nota en la que cuenta que cada año, en Las Vegas, se celebra la reunión mundial de las empresas que se dedican al "Ocio Masculino". Esta vez, el Adult Entertainment Expo (AEE), presentó un revolucionario producto cibernético-sexual.
Se trata de un dispositivo con forma de cohete (sic), inventado por un Ingeniero de la NASA. En su interior, construido de un material siliconado, se genera una serie de sensaciones vibratorias, aumento de temperatura, lubricación y roce, similar a los experimentados por el hombre al entrar en contacto con la vagina, durante el acto sexual.
En el mismo hay dos extremos: uno de ellos puede introducirse en cierta parte de la anatomía masculina; en el otro y he aquí lo más curioso- hay un cable con un puerto USB que se conecta a una computadora, para ser sincronizado a la emisión de una película pornográfica.
La persona, en la vida real, experimentará las mismas sensaciones, en el mismo momento y de manera coordinada, que las que realiza y siente el actor de la película. "Ves al personaje de la película en acción y la señal se envía al dispositivo para que este recree esas sensaciones, lo que le está ocurriendo en ese mismo instante", informa uno de sus creadores.
El precio de venta será de unos 150 Euros más un dólar por minuto de conexión a la Web.
Sin dudas, otra muestra de la mente humana puesta al servicio de la ciencia tecnológica e individual de cada persona, quien elige disfrutar en soledad, o quizás no tanto.
¿Te sorprenden este tipo de inventos? ¿Te interesa que llegue a nuestro país? ¿Estás a favor o en contra de las nuevas propuestas para aumentar el placer individual?