"Y ahora hacé así. Sí, sí, así: repetí esa muequita", guía Grynberg, entusiasmado. Observador y se percibe- muy lúcido, el polaco registra todos los gestos que considera característicos de sus fotografiadas y les pide que sean llevados a fondo. Está claro: el tipo es espontáneo. Juega con sus modelos, las incita a sonreír, a actuar y a hacer morisquetas. Y en el momento menos pensado... ¡click!