El tema de presunta violación sexual de David Copperfield, había permanecido en silencio durante varis semanas por parte de los medios de comunicación. Sin embargo, parece que las autoridades aún mantiene al mago en la mira y podría ser juzgado. El mago, famoso entre muchas cosas por hacer desaparecer la Estatua de la Libertad, podría sentarse delante de un jurado por la presunta violación contra una antigua reina estadounidense en la isla privada que posee en las Bahamas.
La Miss, de quien aún no se ha revelado la identidad, asegura que fue violada y amenazada de muerte por David Copperfield. Los abogados del ilusionista alegan que la mujer "sólo quiere extorsionarlo". Aunque todavía no se han presentado cargos penales, un gran jurado ha aceptado escuchar el caso y el mago podría ir a juicio enfrentándose a los cargos de agresión sexual y amenazas.
Si se demuestra que las acusaciones son ciertas, el escapista lo va a tener difícil para desaparecer esta vez. La versión de la mujer señala que conoció a Copperfield, de 51 años, durante una actuación en enero de 2007 cuando el mago la sacó al escenario para participar en un truco.
Después del show un asistente de éste le dijo que si lo deseaba Copperfield podía ayudarla con su carrera. Según el relato de la supuesta victima, meses más tarde fue invitada a la isla de las Bahamas donde, al parecer, ambos se encontraban totalmente a solas. La modelo, de 22 años, afirma que de haberlo sabido que el encuentro sería a solas, jamás habría ido.
Ésta sostiene también que se produjeron tres asaltos en los que el mago la agredía sexualmente y luego la amenazaba con matarla si se lo contaba a alguien. Tal como señala la modelo, en una ocasión, Copperfield le hundió la cabeza en el agua tras la negativa de ésta a desnudarse ante él. Una vez que hubo abandonado la isla, tomó un avión a Seattle y fue llevada al Centro Médico de Harborview donde la examinaron para confirmar la agresión. Una fuente ha declarado al diario Seatlle Times que algunas de las prendas que llevaba la mujer han sido calificadas como pruebas para el juicio. Tras lo sucedido el FBI abrió una investigación y se registró una bodega que el mago posee en Las Vegas, ciudad donde actúa habitualmente. A Copperfield le fueron incautados 12 millones de dólares.
La versión de Coperfield
"La acusación de que no había nadie en la isla para ayudarla -suponiendo que necesitase ayuda- es absurda. Estuvo hablando con otros invitados, tomó el sol y nadó en las playas de la isla día tras día. También cenó en una ocasión con un grupo de invitados", ha dicho el abogado del mago. "Vino a la isla porque quiso, nadie la engañó, y podía haberse ido en cualquier momento", asegura el ilusionista a través de su abogado.
Vía Jetset.com.co