Alarmados por la acumulación de escombros en órbita, los expertos exhortaron a remover activamente la chatarra espacial para mejorar la seguridad en torno del planeta. Más de 300 científicos que se reunieron durante cuatro días en la Agencia Espacial Europea dijeron el jueves que compartir información es un primer paso crucial para prevenir impactos y pronosticar con mayor precisión dónde podrían caer a tierra los satélites desviados.
"Necesitamos compartir más información", dijo Thomas Schildknecht del Instituto Aeronáutico de la Universidad de Berna. "Consideramos esto muy importante y un desafío para el futuro inmediato".
Varias agencias internacionales rastrean la chatarra espacial. El Comando Estratégico de Estados Unidos sigue el rastro de 13.943 objetos en órbita de por lo menos 10 centímetros (4 pulgadas), y hay miles de piezas más de menor tamaño.
Heiner Klinkrad, de la AEE, resaltó que a largo plazo la remoción de los satélites descarrilados y otras espacionaves abandonadas era esencial para prevenir choques.
El mes pasado, un trozo de chatarra espacial estuvo a punto de hacer impacto en la Estación Espacial Internacional. Los científicos no han precisado a cuánta distancia pasó, pero dijeron que fue peligrosamente cerca. Aunque existen pautas internacionales para regular qué hacer con naves espaciales en desuso o averiadas, no hay modo de hacerlas cumplir.
Klinkrad elogió a los usuarios de satélites comerciales por dejar cada vez más las espacionaves en desuso en la llamada "basurero orbital", una órbita más cerrada que la usada por la mayoría de los satélites, pero observó que a medida que aumenta el número de satélites en órbita se hace más acuciante la necesidad de un sistema efectivo de remoción."Hay muchos contribuyentes a la basura espacial, pero pocos voluntarios para eliminarla", agregó.