Parece que Victoria Vanucci "se colgó" viendo el desfile organizado en las escalinatas del hotel Costa Galana, en la ciudad de Mar del Plata, y se olvidó de llegar a tiempo al teatro, donde su obra se presentaba en la noche del miércoles pasado.
Esto levantó la furia de sus compañeros, Mariano Iudica y Rocío Marengo, que le dijeron de todo menos linda. Pero mucho más irrisoria fue la excusa que dio la ex tensita ahora devenida en vedette, que se justificó diciendo que ella entraba al escenario a los 30 minutos del comienzo, por lo que ella consideró que podían haber empezado sin ella.
Esto demostró que es una amateur, alguien que no conoce los pormenores del escenario, y que un elenco es una conjunto de actores, no individualidades que hacen lo que quieren.
Imaginen la situación: la obra empieza sin que ella esté presente ¿quién le justifica al público si Vanucci no sale al escenario a los 30 minutos de comenzado el espectáculo? ¿Y sus compañeros cómo hacen para seguir el guión con un personaje ausente?
Gerardo Sofovich deberá pensar en contratar actores reales si no quiere que le pasen estas cosas, porque todo actor de raza sabe que su cita con el escenario es impostergable, sin importar lo que esté haciendo o qué asunto de su vida personal se interponga. El show, como todos saben, debe continuar.