Los rumores sobre su retiro de las cabinas se extienden, pero él está aquí. Y que digan lo que digan. Paul Oakenfold, verdadera leyenda del dance, encabeza la quinta edición de Southfest (este sábado 5 de abril en Costa Salguero), y está muy bien acompañado en el cartel: Underworld, Cagedbaby y su discípulo Hernán Cattáneo ("¡Mi amigo!", dice Oakie en español) lo secundan. "Voy a estar tocando nuevo material de mi disco y algunas producciones nuevas que estuve haciendo en mi estudio. Creo que a los argentinos les gusta la música melódica y emocional, y habrá de sobra", dice por teléfono desde Los Angeles el superstar DJ. Aprovechará sus cinco días, además, para pasear por su Buenos Aires querida y ver a Boca ("soy fan").
Oakenfold dice que no tiene iPod, pero de todas maneras se juega a recomendar dos nuevos discos: "Made in the Dark", de Hot Chip; y "Seventh Tree", de Golfrapp. Lo suyo, estos días, pasa por el cine: está trabajando en tres soundtracks diferentes, en películas que van de la acción a la comedia. No es la primera vez que lo hace. Ya había puesto sus teclas al servicio de la saga de Matrix y de "James Bond. Die another day".
Además de Oakenfold, se suben al escenario internacional los célebres Underworld y Cagedbaby, que, en su primera visita al país, demostrará de qué se trata su electropop psicodélico hecho en base a lecciones de piano clásico y travesuras de sintetizador analógico.