Desde tiempos inmemoriales las miradas al cielo nos transportan a mundos de fantasía, las estrellas se transforman en guía, fuente de inspiración y acompañan el andar solitario en la noche abierta. Así, lo que se ve en el cielo varía tanto como la cultura que le impregna un significado. Lamentablemente, no conocemos las jugosas historias fuera de la construida por nuestra sociedad, pero ahora, para quien esté interesado en ello, una buena opción se encuentra disponible en el planetario (¿dónde si no?)
Desde el sábado pasado, todos los fines de semana a partir de las 19 horas, se puede ver Nayic Moqoit, el primero de una serie de entregas que formaran la totalidad del ciclo Huellas en el cielo. El espectáculo narra la historia de un camino por el cual una joven de ciudad viaja al Chaco y se encuentra con otra manera de vivir, otros problemas y visiones del mundo.
"La idea es acercar a la gente otra manera de mirar el cielo y las culturas; ver cómo es el cielo de este grupo aborigen. A futuro esta producción tendrá su video para las escuelas y para llevarla al Chaco", cuenta Alejandro López, astrónomo, casi antropólogo y partícipe del proyecto.
Esta novedosa propuesta del Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires está basado en un trabajo de investigación de la Universidad de La Plata y trabajadores del planetario. El formato multimedia (espectáculo planetario), cuenta con videos filmados en el norte del país, música, animaciones y dibujos, todos originales de la producción.
Nayic (gran cielo en moscoví), conjugará entretenimiento y ciencia, apuntando a la reivindicación cultural de las etnias originarias del territorio argentino. Uno podrá entender la historia de este camino, que como todos los pueblos aborígenes hoy sólo sobreviven bajo el "formato" de peones rurales, lejos de su pasado de recolección, caza y armonía con el medio ambiente. Si el inmerecido resultado de la civilización dejó este saldo entristecedor, parece bueno poder recuperar las culturas de alguna forma (en este caso su visión del cielo) y conocerlas, tal vez después de todo... no sólo sea entretenimiento.