Se quieren mucho, poquito, nada... La mejor forma de comprender la relación entre Luciana Salazar (34) y Martín Redrado (52) podría ser ponerse a deshojar una margarita. Con motivo del cumpleaños de la modelo, el economista volvió a contactarse con su ex, y tuvo un diálogo que inquietaría a Amalia Granata (33).
La panelista de Animales Sueltos viajó a Miami para celebrar su cumple con su mejor amiga, lejos de los escándalos mediáticos. "Quería recargar pilas antes del verano… Estoy azorada. Realmente, no entiendo por qué Martín me hace esto. No me cierra el manejo ni sus actitudes. No logro saber cuál es su finalidad", le contó Luli a la revista Gente en una nota en la que la publicación revela charlas de WathsApp con el ex presidente del Banco Central.
A continuación, la reproducción de fragmentos del chat:
Jueves 6 de noviembre
-Redrado: "¿Por qué nos lastimamos?"
-Salazar: "Martín, si sos feliz, no hay razón para escribirme"
-Redrado: "Sé que me mandé una macana"
Viernes 7 de noviembre
-Redrado: "Feliz cumpleaños, que se te cumplan todos tus deseos... ¿Qué te queda de lo nuestro?"
-Salazar: "¿Y a vos?"
-Redrado: "Una enorme confusión. Corro a llenar vacíos".
-Salazar: "Martín, estás muy solo. No estás bien asesorado. Te falta alguien que te hable con el corazón".
-Redrado: "Siempre fueron buenas tus reflexiones".
-Salazar: "Preservate. Bajo perfil".
-Redrado: "Gracias por preocuparte".
Sábado 8 de noviembre (Cuando Amalia Granata estaba hablando de su relación con el político en Almorzando con Mirtha Legrand)
-Salazar: "Martín, please. No me hace bien lo que está diciendo. Que hable tan livianamente de temas personales y lastimosos como la maternidad. Charlalo, please".
-Redrado: "Ella habla por sí sola, de acuerdo a lo que le parece".
Domingo 9
Redrado: "Ojo con los fotógrafos si vas camuflada al St. Regis..." (en donde se aloja Pablo Pérz Companc, el hijo menor del multimillonario "Goyo" Pérez Companc)
Salazar no respondió ese mensaje.
Por otra parte, Luciana Salazar desmintió pesar apenas 38 kilos: "Peso 43 clavadísimos. Jamás en mi vida, ni felizmente de novia, pesé más de 44 kilos. La delgadez no tiene que ver con ninguna tristeza".