Jennifer Lawrence fue la primera víctima del hacker que mantiene en vilo a Hollywood: las imágenes hot de la actriz recorrieron el mundo y la siguieron otras “víctimas” como Kim Kardashian, Kate Upton y Winona Ryder, entre otras celebridades que vieron expuesta su intimidad en la Web.
Tras permanecer en silencio durante semanas y dejar que sus abogados tomaran cartas en el asunto, Jennifer brindó una extensa entrevista a la revista Vanity Fair en la que habla por primera vez del escándalo.
"Estuve en una hermosa, sana y gran relación durante cuatro años (con el actor inglés Nicholas Hoult). Era una relación a distancia, y la opción era que tu novio mirara porno o te mirara a vos".
“Estaba muy asustada. No sabía cómo iba a afectar mi carrera. El hecho de que sea una figura pública y una actriz no quiere decir que haya pedido que pasara todo esto. Es mi cuerpo y tendría que ser mi decisión, y el hecho de que no lo haya sido es absolutamente repugnante. No puedo creer que vivamos en un mundo como este”, expresó, indignada.
La protagonista de Los Juegos del Hambre contó que intentó escribir un comunicado repudiando lo sucedido pero no logró hacerlo: “Todo lo que trataba de escribir me hacía llorar o enojarme. Empecé a redactar una disculpa pero no tengo nada por lo que pedir perdón”.
Además, explicó el motivo por el que tenía tantas fotos hoto: “Estuve en una hermosa, sana y gran relación durante cuatro años (con el actor inglés Nicholas Hoult). Era una relación a distancia, y la opción era que tu novio mirara porno o te mirara a vos”.
¿Cómo se enteró el padre de Lawrence de lo sucedido? “Por suerte estaba jugando al golf así que estaba de buen humor”. Por otra parte, Jennifer no dudó en calificar la filtración de las imágenes duramente: “No es un escándalo, es un delito sexual. Es una violación sexual y es repugnante”.