"Cambié el monólogo del teatro que hablaba de mi separación. Ahora está más aggiornado y alegre. Empezó en un momento difícil pero lo bueno es que le das la vuelta con el humor y todo se hace más fácil".
Con la sonrisa a flor de piel y un look cancherísimo, Maju Lozano (42) charló con Ciudad.com en medio del Movistar Free Music, homenaje a Charly García en el que tocaron Fito Páez y más bandas.
La conductora de Lalo por hecho por La 100 y actriz de Viudas e Hijos del Rock and Roll no evadió temas y contó cómo está del corazón tras su separación de Julián Varde, su ex pareja y padre de su hijo Joaquín (3); su presente y proyectos laborales y cómo se sintió tras su entredicho con Facundo Arana.
-¿Cómo vivís tu participación en Viudas e Hijos del Rock & Roll?
-Estoy muy contenta con Viudas, es un placer trabajar en este programa. Sobre todo para una que ya tiene 42, es como un recuerdo constante. Además, estoy muy contenta con el grupo de laburo que es divino. Mi personaje se asemeja mucho a la historia de mi vida, tiene mal de amores, va y viene, trabaja en una radio. Mariana va un poco más al frente. La idea era que tuviera que ver con mi realidad para traer la radio a la tele.
-¿Cómo toma tu hijo Joaquín el hecho de verte en la pantalla y escucharte por radio?
-Joaco está muy acostumbrado a escucharme en la radio y ahora está recién viéndome en la tele. Pobre, la radio se la dejo prendida todas las mañanas. Ahora está empezando a entender qué es eso de verme en la pantalla. Ya lo llevé a las grabaciones y todo. Es chiquito, pero igual se da cuenta.
"Soy de las personas que no ‘engancho’ relaciones, soy de duelos largos. Hasta que no está bien cerrada la cosa no arranco. Ahora estoy en el disfrute de estar bien y ya acomodada. No tengo apuro para que llegue el amor, estoy muy tranquila".
-Además de compartir tele con Lalo Mir ya hace 9 años que estás con él en la radio, ¿cómo es trabajar con alguien tan grosso?
-Laburar con él es lo mejor que te puede pasar en la vida, vamos a seguir hasta que seamos viejitos. Es un placer trabajar con Lalo, es como un maestro. Hacer radio con él es como ir al colegio todos los días. Y como persona, ni hablar. Él tiene un modo de enseñar sin que te des cuenta y un día pensás: “Le estoy chupando la sangre a este hombre”.
-¿Cómo es eso de que con tu personaje compartís el mal de amores?
-Y sí. Con respecto al corazón, ¡nada! En realidad tiene que ver con las ganas. Soy de las personas que no “engancho” relaciones, soy de duelos largos. Hasta que no está bien cerrada la cosa, no arranco. Ahora estoy en el disfrute de estar bien y ya acomodada. No tengo apuro para que llegue el amor, estoy muy tranquila. Mientras tanto sigo laburando y en octubre empiezo un programa para la mujer en Fans World TV, que es un canal por Internet. Es un proyecto que hace mucho tiempo tenía ganas de hacer.
-En Rococó, mujeres al filo (los viernes en el Paseo La Plaza) hacés un monólogo que estuvo inspirado en tu separación (en diciembre de 2012), ¿ahora lo cambiaste?
-Sí, cambié el monólogo. Lo había escrito en medio de mi separación y ahora está más aggiornado y alegre. Empezó en un momento difícil, pero lo bueno es que le das la vuelta con el humor y todo se hace más fácil.
-Hablando del humor, hace poco tuviste un fuerte entredicho con Facundo Arana por unas declaraciones que habías hecho en 2010 junto a Isabel Macedo. El también habló del tema, ¿cómo ves lo que pasó entre ustedes a la distancia?
-Ya pasó. En su momento fue una situación rara e inesperada. Yo me tomo con mucho humor mis problemas y mi vida, ni en pedo quiero que a los demás les pase eso. Es un tema terminado y está todo bien. La forma quizás es lo que no comparto. Uno a veces dice cosas que cree que no van a caer mal y yo lo entiendo y lo recontra respeto. Lo que no comparto son los modos de plantear las cosas. Esa es la diferencia entre él y yo.