Los dueños de un travieso perro no podían entender de qué modo su mascota se las ingeniaba para robar comida del microondas. Por eso, un buen día decidieron poner una cámara que grabara los movimientos del canino y así constataron sus inteligentes estrategias. El resultado fue tan desopilante, que decidieron subirlo a YouTube.
En el programa de Guido Kaczka, A todo o nada, mostraron la prueba del delito. En el tape se vio que el perro hacía un trabajo de inteligencia alrededor de la cocina, hasta dar con su cometido: el microondas.
El animal acercó una silla a la mesada, luego se subió, después abrió el microondas y con la pata sacó una bandeja de ricas galletitas recién horneadas. Una vez en el suelo la bandeja y los dulces, el canino se dispuso a disfrutar de su merienda, galleta por galleta.
¡Un crack!